Requisitos para crear una empresa de alquiler de barcos

Analizando los datos podemos darnos cuenta como el alquiler de barcos ha crecido con fuerza durante los últimos años. Pero sin lugar a dudas, se espera que ese crecimiento siga en aumento, de aquí que podamos afirmar que crear una empresa de alquiler de barcos pueda ser una buena opción de negocio. 

Eso sí, la creación de la empresa no se puede realizar a la ligera, sino que hay que cumplir una serie de requisitos para poderla abrir. Si se cumplen y tienes ilusión por ese tipo de negocio te será mucho más fácil conseguir el resultado esperado. Pero desde ahora mismo puedo asegurarte que los requisitos se han reducido, es decir, crear este tipo de empresa es más fácil que hace unos años, lo cual vas a agradecer. 

¿Quién puede crear una empresa de alquiler de barcos? 

Es importante que tengas claro que cualquier persona puede crear este tipo de negocio. Incluso si no tienes titulaciones náuticas podrás montar este negocio, gracias a que los requisitos son mínimos.  

Eso sí, si tienes titulación náutica entonces podrás saber más sobre el tema y en consecuencia te será más fácil sacar el negocio adelante. Al fin y al cabo, antes de montar este tipo de negocio es importante que lo domines para saber que tipo de actividades vas a poder realizar.  

¿Qué servicios se puede ofrecer con este tipo de negocio? 

Actualmente este tipo de empresas suelen ofrecer varios servicios para que las ganancias puedan ser mayores. Vamos a mostrarte algunos de los mejores servicios que puedes ofrecer a tus clientes para que puedas darte cuenta de que realmente son una buena opción. 

Alquiler de barcos 

Sin lugar a dudas se presenta como el servicio más común de este tipo de empresa. Por ejemplo, La Escuela Náutica Ortega ofrece la opción de alquilar barco en La Manga a precios muy competitivos. Eso sumado a otros muchos servicios como la preparación para las diferentes titulaciones hace que la empresa pueda tener mayor margen de beneficios.  

Para que el éxito esté asegurado es una buena idea que la empresa cuente con diferentes barcos para alquilar. De esa manera cada cliente podrá encontrar la opción que realmente le interese. A mayor variedad de opciones, más fácil será que los clientes encuentren lo que buscan y en consecuencia contraten los servicios. Por ejemplo, hay empresas que alquilan motos, yates, veleros… Eso hace que cada persona pueda encontrar lo que necesita, de aquí que la experiencia final sea más positiva. 

Tripulación  

Una buena empresa debe ser capaz de ofrecer a los clientes una buena tripulación. Cuando montas este tipo de negocio te das cuenta de que son muchas las personas que quieren alquilar barcos. Pero también te das cuenta de que muchas de esas personas no tienen la titulación necesaria para llevar el barco. 

Y aquí es donde debes ofrecer a los clientes la tripulación. Gracias a la misma, la embarcación podrá salir del puerto junto a tus clientes. Si no eres capaz de ofrecer opciones a tus clientes, perderás muchos y eso hará que sacar adelante la empresa te resulte más complicado. 

Variedad de itinerarios 

En muchas ocasiones los clientes quieren disfrutar de la experiencia de disfrutar de un barco a través del régimen de alquiler, pero no saben muy bien que recorrido realizar. 

Como empresa profesional tendrás que ser capaz de ofrecer a tus clientes diferentes rutas e itinerarios. El objetivo es tener opciones a través de las cuales los clientes puedan tener la certeza de que van a disfrutar al máximo.  

Piensa que cada cliente es un mundo. Tienes que aprender sobre las necesidades de cada uno de ellos y así te será más fácil saber que es lo que realmente necesitan. Y con las recomendaciones de rutas e itinerarios te será más fácil aprender.  

Entrenamiento 

Tu empresa también podrá apostar por el entrenamiento a la hora de conseguir que los clientes puedan disfrutar de la experiencia al máximo. Muchas empresas proporcionan entrenamiento básico para aquellos que deseen manejar el barco por sí mismos, incluyendo instrucciones sobre navegación, seguridad marítima y manejo del equipo a bordo. 

Como venimos comentando a lo largo del artículo, cuantas más opciones se ofrezcan al cliente, mucho mejor. 

Abastecimiento 

El cliente solo quiere disfrutar, es decir, no quiere complicarse la vida con diferentes cosas. Por ese motivo, es importante apostar por ofrecer un buen abastecimiento a la embarcación.  

Tu empresa puede encargarse de abastecer el barco con provisiones básicas, como alimentos y bebidas, antes del inicio del alquiler, así como gestionar otros servicios adicionales, como combustible, limpieza y mantenimiento. Así el cliente solo tendrá que preocuparse de lo verdaderamente importante, disfrutar. 

Asistencia en el mar 

Una empresa profesional siempre tiene que dar la mejor respuesta al cliente, incluso si ya ha salido a navegar y tiene algún tipo de problema.  

En primer lugar las embarcaciones siempre tienen que estar en perfectas condiciones para evitar problemas en alta mar. Pero si hay algún problema, la empresa tiene que ser capaz de actuar lo antes posible para que el problema pueda ser resuelto con rapidez. Lo importante es conseguir que la experiencia sea buena, por lo que la respuesta tiene que ser lo más ágil posible. 

Hay que estar siempre preparados para diferentes tipos de situaciones. Un buen estudio de las diferentes situaciones te permitirá saber cómo actuar en cada caso. No importa si el problema está relacionado con una avería, atención médica o problema con la meteorología. La respuesta siempre debe ser la adecuada.  

Excursiones 

Son muchas las empresas de alquiler de barcos que también apuestan por hacer excursiones fijas o personalizadas para conseguir que el flujo de negocio sea mayor.  

A la hora de realizar eventos se puede optar por muchas opciones. Por ejemplo, las fiestas a bordo de un barco suelen tener mucha demanda. Pero hay otras opciones como las excursiones temáticas o excursiones personalizadas. Saber encontrar el nicho es importante para poder ofrecer a los clientes lo que buscan y así conseguir que la cifra de negocio pueda ser buena.